El mundo está en tus manos. Enciendes el teléfono y el internet te vuelve poderoso. O al menos, puede hacerlo si lo usas de manera correcta. Con la información ilimitada viene la pérdida de tiempo; lo que comenzó como una investigación fácilmente acaba como un meme.
Por ello es importante aprender a optimizar el tiempo y los recursos, ¿cómo? creando hábitos. Muchas personas piensan que hay quienes “tienen facilidad” para aprender una lengua extranjera en menos tiempo. Pero lo que no piensan es que aquellas personas tan solo dedican más horas a estudiar por semana.
Inglés, Francés, Alemán, Chino… no importa cuál sea la meta; en cambio es esencial ser consistente y, dicho sea, paciente. He aquí algunos consejos para no perder el tiempo cuando uno se lanza a aprender un idioma.
Comienza
No importa si tienes 5 minutos al día o tres horas, lo que cuenta al final es que des el primer paso y pongas manos a la obra.
Establece un horario
Dedícale aunque sea un día a la semana. Lento, pero SEGURO.
Sé realista
No esperes dominar un idioma en dos semanas, tómate tu tiempo y disfruta tu aprendizaje.
Habla
Yo ser Linda. ¿Entiendes? ¡Claro que sí! Al principio quizá no hablarás perfecto, sin embargo las personas entenderán tu mensaje. Se llama comunicación. Y ese es el punto ¿no?
Ahora puedes contactar hablantes nativos e iniciar una conversación por internet en cuestión de minutos, prueba italki, tandem o polyglotclub
Si los recursos gratuitos no te funcionan… TOMA CLASES
¿A quién no le gusta ahorrar? Sí,hay miles de páginas gratuitas con enseñanzas valiosas, pero de nada te van a servir si no eres responsable y autodidacta. Sé honesto contigo mismo y busca un maestro si lo necesitas.
Las tutorías en línea en sitios como italki.com hacen la diferencia, una sola clase a la semana con la guía adecuada te lleva del punto A al B. También puedes buscar cursos en Universidades o Centros Culturales de tu ciudad, por lo general son baratos y congeniar con gente igual a ti es una motivación extra.
Por último,
Mantente motivado
No olvides tus razones para aprender. Si bien el viaje puede ser largo, al poco tiempo la constancia trae recompensas INVALUABLES:
¿Viajar y hablar con nativos? ✔
¿Descubrir/Entender música nueva? ✔
¿Conocer otras culturas? ✔
¿Mejores oportunidades de trabajo? ✔
Haz tu propia lista de razones y no la olvides nunca. La motivación intrínseca, la que viene de dentro es la que nos lleva hacia adelante.
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¿Qué piensas de todo esto? ¿Cómo le haces tú para no abandonar tus estudios?
La vrdad es que una buena organización lo hace todo, teniendo 5 ó 10 minutos.